En la jornada de ayer comenzó el juicio por la muerte de Emilia Uscamayta Curi en una fiesta clandestina el 1 de enero de 2016, en una causa donde están imputados cuatro empresarios de la noche por el delito de "homicidio simple con dolo eventual y desobediencia en dos oportunidades".
Raúl "Peque" García, Carlos Bellone, Santiago Piedrabuena y Gastón Haramboure están siendo juzgados por el Tribunal Oral en lo Criminal N°3 presidido por los jueces Ernesto Eduardo Domenech, Santiago Paolini y Andrés Vitali, quienes desde media mañanana dieron apertura a la sesión y explicaron el procedimiento.
Estuvo presente la fiscal Silvina Langone, las partes damnificadas y la defensa, quienes escucharon e interrogaron a los siete testigos: Eugenia Curi, Claudio Gallardo, Hugo Amarillo, Alejandro Fabián Piedrabuena (hermano del imputado Santiago Piedrabuena), Fabián Marcelo Medina, Agustina Juan Di Martino y Juan Ramón Verón.
"Lo único que pido es justicia por mi hija. Perder un hijo es el dolor más grande que un ser humano puede sentir", expresó Eugenia Fernández Curi, la madre de la víctima.
La mujer recordó que Emilia era la más joven de sus 7 hijos y la describió como "una chica tranquila y estudiosa", a la que le gustaba "compartir el tiempo con sus sobrinos, hermanos o tíos; viajar y trabajar de mesera, vendiendo pan casero o haciendo artesanías para poder costear su carrera".
Al finalizar su relato pidió permiso a los jueces del Tribunal Oral para dejar un mensaje: “Lo único que les pido es justicia por mi hija, perder a mi hija en dos horas es el dolor más grande”.
